La propuesta de reforma, enviada al Legislativo en septiembre pasado, causa controversia porque limitaría al 46 por ciento la participación privada en generación eléctrica para favorecer a la CFE.
Ciudad de México, 8 de febrero (EFE).- El Presidente Andrés Manuel López Obrador dijo este martes, previo a la visita del enviado Presidencial estadounidense para el Clima, John Kerry, que ambas naciones buscan trabajar de «manera coordinada» en temas medioambientales, pese a la polémica Reforma Energética.
«Vamos a platicar con el señor Kerry. Él es muy respetuoso y vamos a buscar formas de trabajar de manera coordinada. Nos importa mucho utilizar el agua, el sol el viento. Hay facilidades para la inversión, lo único es que queremos fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad (CFE)», dijo durante su conferencia de prensa matutina desde el Palacio Nacional.
La Cancillería de México anunció el lunes en un comunicado la visita de Kerry, la cual, precisó, dará seguimiento «al continuo diálogo diplomático que posiciona el combate al cambio climático como una de las prioridades en política exterior para la región norteamericana».
«Kerry viajará a la Ciudad de México para interactuar con sus homólogos gubernamentales y acelerar la cooperación sobre la crisis climática, incluidas las oportunidades para expandir la generación de energía renovable, crear un clima de inversión sólido, combatir la contaminación por metano, hacer la transición a cero (emisiones), y acabar con la deforestación», informó a su vez el Departamento de Estado de Estados Unidos.
El Presidente dijo hoy que hablará con Kerry de su propuesta de reforma constitucional en materia energética, que busca fortalecer a la estatal Comisión Federal de Electricidad (CFE) y ha sido criticada por empresarios y ambientalistas de relegar las energías limpias.
Afirmó que el Gobierno de Estados Unidos ha sido «muy respetuoso» de la soberanía del país y mencionó que tiene una buena relación con Kerry, con quien ya recorrió el sureste del país a finales del pasado año.
«Es cosa de llegar a acuerdos con el Gobierno de Estados Unidos para inversiones, no privatizar sino recibir créditos a tasas bajas como cobran los intereses en Estados Unidos, y esto sería una inversión en favor del medioambiente», apuntó.
Aunque dijo que México ha recibido críticas sobre la contaminación, López Obrador mostró una gráfica sobre las emisiones de dióxido de carbono por países y per cápita en el mundo, y aseguró que México está debajo de las cinco toneladas de emisiones estimadas de CO2.
Mientras que varios países, entre ellos Estados Unidos, lo superan.
En octubre pasado, Kerry puso a México como ejemplo en la lucha contra el calentamiento global, haciendo alusión al millón de hectáreas reforestadas como parte de la iniciativa Sembrando Vida.
Pero también invitó al Gobierno mexicano a virar su economía hacia las «cero emisiones» de dióxido de carbono y a apostar por la energía eólica y solar.
En ese sentido, López Obrador dijo que la CFE produce energías limpias «y tiene una diversidad de fuentes para generación de energía que no se tiene en otros países».
La estatal «tiene muchas posibilidades, (como) el combustóleo, el gas, pasando por el agua, el viento, el sol, la (energía) nuclear», comentó.
La visita de Kerry se produce tras el viaje el 21 de enero de la Secretaria de Energía de Estados Unidos, Jennifer Granholm, quien expresó las «preocupaciones» de Washington por el «potencial impacto negativo» de la Reforma Eléctrica que impulsa el Presidente.
La propuesta de reforma, enviada al Legislativo en septiembre pasado, causa controversia porque limitaría al 46 por ciento la participación privada en generación eléctrica para favorecer a la CFE, empresa del Estado.
Además, eliminaría los reguladores autónomos de energía, revisaría contratos previos y priorizaría a las plantas fósiles de CFE sobre las renovables de privados.